El FC Barcelona está continuamente buscando formas de optimizar su situación financiera. Recientemente, dos noticias clave han destacado en el club en cuanto a su situación económica: la posible obtención de 60 millones de euros por la sustitución de Libero y las medidas para cumplir con las regulaciones de fair play financiero. Este artículo examina estos temas y cómo impactan en la gestión financiera del club.
Según la información proporcionada por Ferran Correas, el FC Barcelona espera recibir hasta 60 millones de euros de un nuevo inversor en los próximos días. Este ingreso es crucial para mejorar la posición financiera del club, especialmente en términos de fair play financiero. De estos 60 millones, el Barça confía en recibir al menos 40 millones de euros de forma inmediata, lo que permitiría al club liberar una cantidad significativa de fair play financiero (FPF) para inscribir nuevos jugadores en el próximo mercado de fichajes. Concretamente: 40M€ de FPF.
Esta entrada de capital no solo aliviaría las tensiones económicas, sino que también proporcionaría al Barça una mayor flexibilidad en el mercado de transferencias. Con 40 millones de euros adicionales de FPF, el club podría registrar nuevos contratos y reforzar su plantilla sin exceder los límites impuestos por LaLiga.
Aparte del ingreso esperado del sustituto de Libero, el FC Barcelona está adoptando otras estrategias para mejorar su situación de fair play financiero. Entre las medidas destacadas se encuentra la venta de jugadores y la reducción de la masa salarial. Jugadores como Chadi Riad, Mika Faye y Marc Guiu están generando ingresos adicionales y liberando más espacio en la capacidad de inscripción del club.
Por ejemplo, las ventas de Chadi Riad por 9 millones de euros, Mika Faye por 15 millones y Marc Guiu por 6 millones, aportarían fondos significativos que podrían ser utilizados para inscribir nuevos jugadores. Además, la posible salida de jugadores como Eric García, Ansu Fati o Lenglet contribuiría a un ahorro en salarios, mejorando aún más la flexibilidad financiera del club.
Jugadores que no están inscritos
Aunque el club espera recibir ingresos significativos, también tiene compromisos financieros que deben ser considerados. El FC Barcelona planea invertir 9 millones de euros en el salario de Iñigo Martínez y unos 10 millones en Vitor Roque (salario + amortización). Estas inversiones son esenciales para fortalecer la plantilla y mantener al equipo competitivo en las principales competiciones.
LaLiga impone estrictas regulaciones de fair play financiero que los clubes deben cumplir para evitar sanciones. Estas reglas están diseñadas para asegurar que los clubes no gasten más de lo que ganan, promoviendo una gestión financiera sostenible. En este contexto, el Barça ha estado trabajando arduamente para cumplir con estas normativas, utilizando ingresos de ventas, ahorros salariales y otros ingresos adicionales para equilibrar sus cuentas.
La prima de renovación del acuerdo con Nike también juega un papel crucial en esta ecuación. Esta prima no solo aumenta el límite salarial del club, sino que también proporciona fondos adicionales que pueden ser utilizados para inscribir nuevos contratos bajo la regla 1:1 de LaLiga. Esta regla permite al Barça generar FPF con mayor facilidad. Por cada euro que ahorre o genere de plusvalía, euro que puede usar en una nueva inscripción.
Estando excedido, por cada euro que ahorras, puedes usar el 60% de ese euro (70% en el caso de jugadores que supongan >5% de la masa salarial). Y por cada euro que ganas en plusvalía, podías usar un 20% (35% en el caso de jugadores que supongan >5% de la masa salarial). Nada que ver con la regla 1:1, que cambia totalmente el juego y el mercado azulgrana.